Hola, queridas semillas. ¡Qué alegría reencontrarnos!
Hoy vamos a bucear en un tema que, de seguro, a todos nos ha tocado sentir en algún momento: el estancamiento.
Este episodio, que ya pueden ver en el video de arriba, nació de un comentario hermoso de una hermana, en respuesta a nuestro video sobre los elementos. Ella compartió una experiencia de aparente estancamiento con un libro que creó con mucho amor y servicio.
Y es que, queridos hermanos, esta sensación de «estar parado» es algo que todos podemos resonar. No importa la forma: puede ser un libro, un proyecto, un servicio, una relación, ¡o lo que sea!.
Salir del Estancamiento: La Vida en Movimiento Constante ✨
Es fundamental recordar que la vida, en sí misma, está en movimiento constante. Aunque a veces no lo percibamos, o no lo sintamos, todo en nuestro interior (la sangre, el sistema nervioso, el aire que respiramos) y en el entorno, se mueve sin cesar.
Entonces, ¿qué es el estancamiento? Es una sensación, una interpretación. Si observamos de cerca, por ejemplo, ese libro que no se vende como quisiéramos, nos damos cuenta de que no es que no se mueva, sino que no se mueve de la manera que nos gustaría.
Nos hemos perdido en la creencia de que las cosas deberían ser diferentes a cómo son en este instante.
La Sabiduría del Instante Presente 🧘♀️
Aquí entra un acto profundo de humildad: poder observar que, en el instante presente, si la experiencia de ese libro (o proyecto, o relación) se está dando de una forma que no nos gusta, la vida, aun así, está en movimiento y expresando algo para ser visto.
Todas las experiencias son neutras, son igual de válidas, nos gusten o no. Si percibimos que algo «no está bien», la vida nos está mostrando una experiencia para ser amada, una que quizás nos estamos resistiendo a amar.
La vida siempre ofrece su máximo potencial para ser reconocida a sí misma como vida plena, tanto en el éxito como en el no éxito, tanto si se vende o no se vende. Es un acto de revelación, de integración de algo que hemos separado internamente.
El Agua Estancada: Reflejo de lo Interno 💧
Cuando leí ese mensaje, mi atención se fue a una pileta con agua estancada que estaban renovando. Esa agua estancada fue una metáfora perfecta: si hay estancamiento en nuestra experiencia externa, es un reflejo de algún estancamiento interno, de algo que quizás no quisimos ver en algún momento.
A menudo, ese «algo» es el miedo. El miedo a que lo que creamos con amor no sea visto, no sea reconocido por otros. Pero el amor, al ser canalizado a través de la experiencia de vida, ya es visto. Si hay un miedo estancado, hay una emoción por desvelar.
Si te abres a sentir y atravesar esa sensación de frustración o miedo, sin juzgarla, esa agua interna empezará a moverse. La purificación del agua no es un reemplazo, sino un reconocimiento de su movimiento intrínseco, de su fluir natural.
Propósito y Liberación del Ser 🦋
Al atrevernos a observar sin juzgar, esa agua estancada se empieza a purificar. No es una cuestión de tiempo, sino de voluntad. La voluntad de reconocer y observar es lo único que se requiere. La respuesta está inmediatamente detrás de esa sensación de estancamiento.
Quizás, a través de esa claridad, te des cuenta de que el mero hecho de haber creado ese libro ya era su propósito. El propósito de las cosas creadas es la experiencia de esas cosas tal como son, no como nos gustaría que fuesen.
Puede que ese libro fuera para ti, para liberar algo en tu interior, para tu propio aprendizaje. Y al liberar ese aprendizaje interno, es posible que luego se desbloquee para que otros también aprendan de él.
La observación del presente es el camino. Si intentamos forzar un futuro, rechazamos la inteligencia de la conciencia que ya sabe el verdadero propósito de todo. Y al final, al liberarnos a nosotros mismos de esas expectativas, liberamos también la experiencia, permitiendo que suceda en su total magnitud, la magnitud que ya está presente.
Mi gratitud enorme por este comentario, que abrió esta puerta de indagación. Aceptar y reírnos de estas resistencias son grandes liberadores.
Les mando un abrazo enorme, y hasta la próxima. ¡Adiós!