Gracias por compartir este nuevo encuentro de El Ser Emprendedor. En esta mentoría profundizamos en algo muy importante: la apertura al recibir.
Pero no como un simple resultado externo, sino como un movimiento interno que solo puede manifestarse desde la entrega.
Soltamos la necesidad de controlar, de forzar, de “hacer para lograr”. Y en ese espacio de silencio y sinceridad, comenzamos a ver lo que ya está siendo entregado.
💡 Lo que se reveló
Nos dimos cuenta que el emprendimiento es un camino de autodescubrimiento. No es una herramienta para “tener éxito” según la mente del mundo, sino una excusa perfecta para observar todo lo que todavía no nos animamos a mostrar, todo lo que evitamos, todo lo que escondemos.
Aparecieron claves profundas:
- La necesidad de avanzar sin esperar que “algo cambie afuera”.
- El reconocimiento de que la forma nunca define el contenido.
- El valor de elegir un pequeño objetivo, no para cumplirlo, sino para ver qué emociones emergen al proponérnoslo.
🌊 Compartires del alma
Algunas frases poderosas que surgieron:
➤ “No hay una forma correcta. Todo sirve para recordar quiénes somos.”
➤ “El objetivo no es lograr algo, sino sentir lo que me impide avanzar.”
➤ “El emprendimiento no es un fin. Es una excusa para darnos al mundo desde el amor.”
Y una de las frases clave:
“Dar amor no es hacer cosas. Dar amor es vibrarlo en el instante.”
🎯 Una práctica para este nuevo ciclo
Acompañando esta mentoría, abrimos una nueva práctica de 7 días. El primer paso es elegir un pequeño objetivo que te incomode, que no te animes del todo, que se sienta desafiante, pero posible en una semana.
No se trata de conseguirlo, sino de ver lo que surge al intentarlo. Ahí está el regalo. La práctica va a guiarte paso a paso.
✨ Y recordá:
“Recibir es inevitable para aquel que se entrega al dar.”
Gracias por estar, por abrirte, por recordar una vez más que todo lo que buscás… ya está aquí.
Con amor,
Karel