En el camino espiritual, pocas cuestiones generan tanta confusión como la relación con el dinero.
Cobrar o no cobrar, donar, aportar voluntariamente, ofrecer gratis… parecen decisiones externas, pero en realidad son espejos de lo interno.
Como dice Sergi Torres:
“Cuando manejamos el dinero, lo que manejamos es significado. Pero observa: tu ser no es su significado.”
🌱 El ego y su necesidad de comprender
El ego busca comprender para sostenerse. Intenta asociar conceptos, crear teorías y justificar sus decisiones. Incluso en lo espiritual, se disfraza con palabras como “energía”, “abundancia” o “servicio”, pero muchas veces lo que busca es seguir sintiéndose importante.
El riesgo está en querer explicar o justificar el dinero desde esta mirada. Al hacerlo, el ego convierte el dinero en una “prueba de espiritualidad” o en un “obstáculo que hay que trascender”.
🛡️ La ilusión del protector o salvador
Una de las distorsiones más comunes es la figura del “salvador”. Quien ofrece un servicio puede sentir que, si alguien no accede por dinero, queda excluido de la verdad o del amor. Desde ahí, surge la necesidad de proteger al otro, de evitarle sufrimiento, de “no dejarlo afuera”.
Sin embargo, esa visión es un espejismo. La verdad y el amor no pueden limitarse por una condición material. No hay charla, curso o sesión que pueda encerrar la totalidad del amor. Cada ser está ya sostenido en su propio camino.
“El Amor no protege, confía. El salvador se siente necesario; el Amor sabe que nada falta.”
💡 Dinero como herramienta, no como obstáculo
Sergi señala que el dinero en sí mismo es neutro:
“Cuando tú das dinero, no das dinero. Das el significado que le otorgas a ese dinero.”
Así, el verdadero trabajo no está en fijar si debe ser gratuito, donación, aporte voluntario o precio fijo, sino en observar desde dónde surge esa decisión.
- ¿Desde el miedo a que otros no puedan acceder?
- ¿Desde la necesidad de validación o reconocimiento?
- ¿O desde la coherencia interna, el amor y la confianza en la vida?
🔄 Formas distintas, misma esencia
Algunos ofrecen todo gratis. Otros ponen un precio fijo. Otros abren al aporte voluntario con sugerencia. Lo esencial no es la forma, sino la coherencia interna.
Un mismo servicio puede vivirse desde el miedo (“que nadie se quede afuera”) o desde el amor (“confío en que todo se da como tiene que darse”). Lo primero carga al que ofrece, lo segundo libera a ambas partes.
🌟 La verdadera abundancia
La abundancia no depende de la cantidad ni de la prosperidad material, sino de la conciencia presente.
“Quienes se saben abundantes, se saben abundantes no por lo que tienen, sino por ser conscientes de sí mismos.” — Sergi Torres
Cuando esa conciencia se abre, ya no hay escasez posible: ni de dinero, ni de amor, ni de vida. Lo único que queda es el fluir del presente, siempre completo, siempre suficiente.
El dinero no limita el amor ni la verdad. Lo que puede limitarlas es la mirada distorsionada que proyectamos sobre él.
La invitación es a soltar el rol del salvador, la necesidad de proteger o justificar, y abrirnos a una coherencia interna donde cualquier forma externa —precio fijo, voluntario o gratuito— sea expresión natural del Amor.
Hasta este instante.
Karel
PD.: Te invito a nuestro canal de Youtube, donde subo episodios cada semana.