Hola Semilla,
En este encuentro exploramos lo que llamamos las 7 cualidades del Ser Emprendedor.
En otras ocasiones quizás las hayas escuchado como “principios”, pero en esencia hablamos de lo mismo: expresiones naturales de nuestro Ser cuando emprendemos desde la conciencia.
Estas cualidades no son metas que alcanzar en el futuro, sino realidades ya presentes en nosotros. Cuando las reconocemos, se revela un modo de emprender más ligero, más verdadero y profundamente alineado con lo que somos.
🌟 Cualidad #1: Su Propósito
El propósito no está afuera ni en un futuro lejano. Nuestro propósito se cumple en este instante, en el simple hecho de existir. No necesitamos correr tras metas inventadas para darle sentido a la vida: la existencia misma ya es sentido.
El propósito de mi vida no puede estar en otro momento que no sea este, porque solo existo ahora.
Cuando descansamos en esta verdad, dejamos de perseguir y empezamos a habitar el instante como suficiente.
🧭 Cualidad #2: Su Guía
La vida misma es nuestra guía. Todo lo que se presenta en la experiencia —una conversación, una emoción, un imprevisto— es un recordatorio que nos señala hacia adentro.
No necesitamos salir a buscar señales especiales: lo que aparece frente a nosotros ya es la guía perfecta del instante. Al aceptarla, se abre una nueva visión y el mundo se vuelve un espejo que nos conduce a mayor conciencia.
📚 Cualidad #3: Su Sabiduría
La sabiduría no es acumular conceptos. Es dejar que la experiencia atraviese nuestra conciencia y nos revele lo que necesitamos ahora.
No se trata de hacer todo lo que surge en nuestra mente, sino de reconocer que lo esencial ya está presente.
La sabiduría verdadera es viva, no conceptual; se integra en el instante y nos abre a nuevas posibilidades.
💖 Cualidad #4: Su Presencia
La presencia es el puente entre lo sutil y lo denso, entre lo invisible y lo visible. Habitar el corazón nos permite descubrir la claridad de este instante: qué hacer, qué decir o incluso cuándo no hacer nada.
Cuando volvemos al centro, nos damos cuenta de que no podemos equivocarnos, porque la vida se está desplegando ahora. La presencia nos libera de la prisa y del peso de elegir desde el miedo.
🔥 Cualidad #5: Su Accionar
El accionar auténtico nace del corazón y se reconoce porque es sencillo y posible con lo que ya tenemos. No es la acción grandilocuente que la mente planea para demostrar algo, sino el gesto cercano que responde a lo que la vida ya nos puso delante.
A veces puede ser tan simple como acompañar a una amiga, ordenar un espacio, escribir unas palabras.
El verdadero accionar nunca nos saca de la paz, sino que fluye como una extensión natural del amor.
🌍 Cualidad #6: Su Compartir
Compartir desde el Ser no es demostrar ni buscar reconocimiento. Es permitir que la vida se exprese a través nuestro.
Puede ser con palabras, con silencio, con una creación o con un gesto cotidiano. Lo esencial no es la cantidad, sino la intención desde donde compartimos. Cuando compartimos desde la plenitud, lo que ofrecemos se siente como un regalo, no como una demanda.
💎 Cualidad #7: Su Abundancia
La abundancia no se encuentra en lo que perseguimos, sino en lo que ya se nos da.
La vida siempre ofrece los recursos necesarios para este instante, aunque no siempre coincidan con lo que la mente espera. «Si hoy tengo dos naranjas, esas dos son suficientes para el jugo que me corresponde ahora.» Reconocerlo nos abre al agradecimiento y a la certeza de que nada falta.
🔄 Retroalimentación circular
Estas cualidades no se viven como una escalera lineal, sino como un ciclo que se retroalimenta:
El propósito nos abre a la guía, la guía a la sabiduría, la sabiduría a la presencia, la presencia al accionar, el accionar al compartir, el compartir a la abundancia… y la abundancia nos devuelve al propósito ya cumplido.
Este movimiento circular mantiene vivo el flujo de la vida en nosotros, recordándonos que el inicio y el final se encuentran en la misma certeza: ya somos completos ahora.
🧘 Meditación de integración
Para cerrar este recorrido, realizamos una breve meditación contemplando los siete chakras como luces encendidas dentro de nosotros.
Al agradecer cada luz, reconocimos la unidad entre todas las cualidades y el ciclo que forman juntas. De esa manera, lo compartido dejó de ser una idea y se volvió experiencia viva en nuestro cuerpo y en nuestra conciencia.
Un abrazo enorme, hasta este instante.
Karel
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