La Abundancia que YA tienes (más allá del dinero)


Hola Semilla,

La solución a cualquier desafío económico que percibamos no reside fuera de nosotros, no está en la economía ni en el dinero en sí mismo, sino en la Abundancia que ya somos.

A menudo, ponemos demasiado valor y poder en el concepto del dinero, tanto que terminamos cediéndole nuestra propia capacidad y sintiéndonos impotentes.

Nos quitamos el poder a nosotros mismos al creer que no podemos porque «no tenemos dinero».


💖 El Poder que entregamos

Al entregarle tanto poder al dinero, nos despojamos de nuestra autonomía.

Creemos que solo seremos capaces o suficientes cuando alcancemos cierta cantidad, olvidando que fuimos nosotros quienes le dimos ese poder en primer lugar.

Este instante presente nos ofrece todo lo que necesitamos para vivirlo plenamente, porque si algo faltara, el presente mismo no existiría.


La Abundancia del presente

La vida nos envuelve con su flujo existencial vital en cada momento, incluyendo nuestra situación económica actual. Si ahora mismo contamos con una cantidad específica de dinero, esa es precisamente la experiencia abundante que necesitamos vivir y, si es el caso, integrar la sensación de insuficiencia o impotencia.

No es que necesitemos más para sentirnos completos; ya somos completos con lo que es. Nuestra existencia es independiente de la cantidad de dinero que poseamos; siempre hemos existido, independientemente de nuestros recursos.


🧘‍♀️ Amar lo que Es

Rechazar nuestra realidad actual, ya sea la cantidad de dinero, el trabajo o cualquier otra circunstancia, es lo que perpetúa esa misma experiencia. Si no amamos nuestra vida tal como se presenta con lo que tenemos, seguiremos repitiéndola una y otra vez.

La verdadera autonomía reside en la libertad de amar o rechazar lo que se nos da en este instante. Es solo a través del amor y la aceptación profunda de nuestra situación presente que se abren nuevas posibilidades y se permite que la experiencia se transforme.

La «mejora», si es que la buscamos, no llega rechazando el instante, sino amándolo profundamente.

Abracemos con amor nuestra vida tal como es ahora, con nuestra pareja, nuestros hijos, nuestro trabajo y nuestra economía. Cuando amamos lo que tenemos, la necesidad de que se repita o cambie se disuelve naturalmente.

Un abrazo enorme, hasta este instante.

Karel

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